Urgencias existenciales (Aka: Doctor Slump). Hyun Jong-ho. Ficha de identificación y crítica.

 

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UNA SERIE CÓMICA EN TONO DE PARODIA QUE ALEJA ESTE RELATO DE LOS KDRAMAS COREANOS

Ficha de identificación:

Título original: Dakteoseulleompeu

País: Corea del Sur

Año: 2024

Formato: Serie; episodios : 16 ; duración: 22 minutos aproximadamente

Género: comedia

Plataforma: Netflix

Edad recomendada: mayores de 12 años

Dirección: Hyun Jong Oh

Guion: Baek Seon-woo

Compañías: JTBC; distribución: Netflix

Casting:

Park Hyung-sik: Yeo Jeong-woo

Park Shin-hye:Nam Ha-neul

Yoon Park: Bin Dae-yeong

Kong Seong-ha: Lee Hong-ran

Jang Hye-jin: Kong Wol-seon

Song Ji-woo: Do Hye-ii

Yoon Sang-hyeon: Nam Ba-da

Hyun Bong-sik:  Kong Tae-seon

Oh Dong-min: Min Kyung-min

SINOPSIS:

Dos antiguos compañeros de enseñanza secundaria muy brillantes, comenzarán a tener problemas al iniciar su carrera profesional, algo que contribuirá a unirlos.

LO QUE  SE DICE:

La serie ha sido, como es habitual, muy bien valorada en Estados Unidos. La página Imdb le atribuye una nota media de 7,5, de acuerdo con las valoraciones de 3,600 usuarios; Rotten Tomatoes todavía no ofrece datos de prensa y público.

CRÍTICA:

Doctor Slump (Aka: Urgencias existenciales) es una serie divertida, elegante, creada al más puro estilo de la Ola Hallyu, pero sin tomarse en serio a sí misma y optando por una ironía fina, en la que los dos jóvenes protagonistas, brillantes e inteligentes, el número uno de su promoción (ambos se formaron en la facultad de medicina, aunque optando el joven, hijo de una familia pudiente, por la cirugía plástica, ella, de origen más humilde, por la medicina más convencional). Terminados sus estudios y al  iniciar sus carreras profesionales  se enfrentaron por primera vez a la vida real y sufrieron gravemente sus arañazos, lo que contribuyó a acercarlos. Aquí da comienzo un relato distendido y muy entretenido, que se distancia del kdrama convencional, mostrándonos a dos jóvenes inteligentes como dos auténticos niños, cuyas reacciones son a veces maduras,  otras más infantiles, pero en ambos casos verosímiles. El resultado se traduce en las magníficas valoraciones de un público norteamericano, antes el dueño de la Meca del Cine, que hoy debe competir con las producciones de una gran cantidad de países emergentes, entre ellos Corea del Sur.