Sucesion. HBO. Ficha de identificación y crítica primera temporada.

 

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LA CRÓNICA DE UN CAMBIO DE MODELO PRODUCTIVO ANUNCIADA

Ficha de identificación:

Título original: Succession

País: Estados Unidos

Año: 2018

Temporada 1; episodios 11; duración 60 minutos; 4 temporadas, 39 episodios

Género: drama

Recomendación: Clasificada para mayores de 16 años en EE.UU. Los criterios son diferentes en cada país, t van desde los 7 de Turquía, pasando por los 12 de Francia y los 18 de Corea del Sur. 

Creador: Jesse Armstrong

Directores: Adam McKay  (No mires arriba, 2021; La gran apuesta, 2015); Mark Mylod, Andrij Parekh, Adam Arkin, Miguel Arteta , S.J.Clarkson, Shari Springer Bergman

Guionistas: Jesse Armstron, Susan Soon He Stanton, Georgia Pritchett, Jon Brown, Tony Roche, Jonathan Glatzer, Lucy Prebble, Anna Jordan, Ted Cohen, Mary Laws, Will Tracy

Casting: Avy Kaufman, Francine Maysler, Douglas Aibel, , Henry Russell Bergstein

Dirección de Fotografía: Andrij Parekh, Patrick Capone, Chrish Norr, Katelin Aritzmendi

Música: Nicholas Britell

Edición: Ken Eluto, William Henry, Jane Rizzo, Anne McCabe, Ellen Tam, Joe Giganti,  Brian A. Kates, Venja Bruk, Mark Yoshokawa, Suzy Elmiger

Dirección artística: Molly Mikula, Marci Mudd, Kim Jennings, Carmen Cárdenas, Cristina Onori, Andrew Bennett, Mark Harris, Caroline Grebbell, David Stein, Deborah Jensen

Decoración del set: George DeTitta Jr,. Luisa Iemma, Letizia Santucci, Sophie Newman

Diseño de Vestuario: Michelle Matland, Catherine George

Maquillaje: Jill Carol

Peluquería: Valerie Velez

Productores: Jon Brown, Dara Schnapper, Gabrielle Mahon, Jonathan Filley, Ron Bozman, Mark Cooper

Productores ejecutivos: Jesse Armstrong, Will Ferrell, Adam McKay, Kevin J. Messick, Frank Rich, Jon Brown, Lucy Prebble, Tony Roche, Jane Tranter, Mark Mylod,  Scott Ferguson, Will Tracy, Ilene S. Landress, Marco Valerio Pugini

Diseño de producción: Stephen H.Carter, Kevin Thompson

Compañías productoras: Gary Sanchez Productions, Hyperobject Industries; distribuye HBO Max

Reparto:

Nicholas Braun: Greg Hirsch

Brian Cox: Logan Roy

Kieran Culkin: Roman Roy

Peter Friedman: Frank Vernon

Matthew Macfadyen: Tom Wambsgans

Alan Ruck: Connor Roy

Sarah Snook: Shiv Roy

Jeremy Strong: Kendall Roy

J.Smith-Cameron: Gerri Kellman

Dagmara Dominczyk: Karolina Novotney

Hiam Abbass: Marcia Roy

Arian Moayed: Stewy Hosseini

SINOPSIS:

La serie pone su foco sobre una familia disfuncional, el magnate Logan Roy y sus cuatro hijos,  que controla  un conglomerado de negocios, la mayoría relacionados con la comunicación (prensa, TV, satélites...), que entra en crisis cuando llega el otoño del patriarca.

LO QUE SE DICE:

La serie, una superproducción en la que participan importantes realizadores, guionistas, directores de casting, diseño de vestuario..., de la que es una pequeña muestra la ficha técnica que incorporo, ha gozado del aplauso del público y la prensa, con algunas excepciones, como evidencian  las notas medias que usan las páginas que consulto como referencia. La española Filmaffinity publica una nota media de 7,9, basada en el voto de 11,561 votos, una media que la norteamericana Imdb eleva a 8,8, de acuerdo con las valoraciones de 179,000 usuarios. Rotten Tomatoes da un índice de valoración de la prensa del 95%, y del 89 % del público, sin aportar los datos de su encuesta. La serie ha recibido una cantidad de premios que podéis consultar en Filmaffinity. Las reseñas son finalistas y se centran en la cuarta temporada.

CRÍTICA:

La serie es en realidad un reboot de los relatos seriados que triunfaron  desde las décadas de los 70 hasta la de los 90 del siglo XX, en un tiempo en el que nadie podía imaginar que iban a aparecer plataformas de streaming; hablamos de series como Dallas (1978-1991); Falcon Crest (1980); Dinastía (1981) o Los Colbys (1985), un producto que se enmarcaba en un género al que se llamaba Soap Opera ( series jabón), dirigido a las amas de casa. Cuando aparecieron estos relatos que se extendían en el tiempo, se interrumpían con anuncios, que en este caso eran de limpieza y se emitían en horarios en los que el marido no estaba en casa, programando las noticias, el deporte y otros espacios masculinistas para cuando llegaba el esposo y la mujer, que había dejado el hogar como un espejo, se convertía en el descanso del guerrero, mucho más feliz que las mujeres ricas y desgraciadas de las telenovelas. Los tiempos han cambiado, no solo la idiosincrasia de las gentes, sino que estamos entrando en un nuevo modo de producción predominantemente tecnológica, en el que el usuario es el desarrollador de contenidos, el 'trabajador' voluntario y sin sueldo al servicio de grandes conglomerados como el que protagoniza esta historia. Kendall Roy, el hijo predilecto del magnate, despide en un solo día a 500 trabajadores informáticos, dejando apenas una docena, y confiando en que serán sus clientes quienes nutran de fotografías y textos los espacios de su sitio. Así ocurre en la realidad y todos lo sabemos.

La primera temporada presenta a los personajes, acerca la familia al público, y es aquí donde se dan las similitudes citadas con las series de final del siglo pasado, con un cambio importante en el tratamiento de la forma, austero, a cargo de unos directores de fotografía que optan, en general, por tonos gris-azulados, que se asocian a la eficacia y la seriedad que se asocia a estos grandes conglomerados que se alojan en grandes rascacielos neoyorquinos, aunque al acercar el objetivo a sus protagonistas vemos que se imponen las emociones, las vísceras, la búsqueda de atajos para alcanzar los objetivos espurios de sus personajes, que buscan la sombra del poder político y no se amilanan, no moderan sus amenazas, que a veces se convierten en una triste realidad. Logan es un hombre al que temen sus hijos por su primitivismo a la hora de expresar sus ideas. Se aprecian algunas diferencias en la construcción del discurso visual en cada uno de los directores, aunque quizá el más arriesgado en la combinación de una edición clásica y otros modos más extravagantes es Adam McKay. Se puede, pues, concluir, que el género tiene sus referentes en las series citadas, aunque, cuando lleguemos a la segunda temporada, veremos que el contexto en el que se inscribe este relato ha cambiado tan profundamente, y es tan rápido el desarrollo del nuevo modo de producción dominante, que ha provocado una tremenda desorientación den la sociedad global, que camina a marchas forzadas (en el film no se auguran más de dos años para poder visualizar cambios muy importantes) hacia un mundo absolutamente diferente.

Cada uno de los hijos de Logan se encuentra en una posición ideológica y táctica diferente: Roman Roy, en la entrevista que mantiene con su padre, en la que tiene que decidir a cuál de sus hijos le confía su macroempresa, propone deshacerse de las startups, pequeñas empresas nacidas al calor de la nueva era, con un negocio de modelo estable basado en las nuevas tecnologías, del que el más desinformado de los vástagos quiere eliminar , cuando acaban de nacer, y centrarse en lo que llama 'financiarización' para salir a flote, manteniendo el control de las noticias gracias al apoyo de los políticos, la manipulación del mercado, dejando el impulso regenerador a la demanda. Esta es la más conservadora de las propuestas, que no desprecia actuaciones contra los 'enemigos' propias de otros tiempo. Frente a esta propuesta, la hija Shiv propone, sin embargo, vender los negocios que queman 'pasta' (videojuegos, películas indies, informativos, prensa, TV...), fundirse con productoras, y propulsar parques, cruceros y otras formas de entretenimiento. El hijo mayor no propone nada, porque desea ser Presidente de la nación y solo reclama eliminar los impuestos, mientras Kendall está castigado por su padre, y de momento calla, aunque promete ser el artífice de más de una idea de su hermana. Esto lo veremos en la segunda temporada, en la que los Roy saldrán de sus mansiones y el relato se abrirá a la sociedad en su conjunto; oiremos hablar de socialistas, sindicatos, despidos...Lo veremos cuando hable de las temporadas siguientes, en las que se despejarán muchas incógnitas que hoy nos abruman. Un buen elenco y una buena documentación sobre lo que desaparece y aquello por lo que va a ser sustituido en la nueva era son promesas que apuntan claramente y que animan a los espectadores a no dejar la serie.