el gabinete de curiosidades. Crítica de los ocho episodios.
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EL TRASTERO DEL ALMA AMERICANA QUE EMPIEZA A DAR SEÑALES DE CORRUPCIÓN TRAS LA PRIMERA INVASIÓN, LA DE BUSH PADRE DE IRAK
" (...) llaves de trasteros, esos lugares de toda la vida donde mantenemos vivo el pasado, repletos de cosas que nos recuerdan nuestras hazañas, secretos y pecados. Un camafeo que no han podido devorar las ratas, un mando a distancia...
CRÍTICA:
1. Trastero 36. Guillermo Navarro
Guillermo del Toro comienza pisando fuerte en un relato propio clásico, en el que pesa más el controvertido H.P.Lovecraft, (un racista radical, cuyas teorías repugnaban incluso a algunos nazis) que Poe , una historia que discurre en la horizontalidad, sin recurrir al arriba y abajo del autor de 'La Casa Usher' ( al desván y el sótano, donde residen la conciencia y el sótano donde habita el subconsciente. Rebeca Martín Lopez* en su tesis doctoral habla de heterodiégesis; muy ilustrativa la película de Ari Aster, 'Hereditary'). En el fondo, y sin que el protagonista sea consciente, imágenes del televisor, el medio de comunicación por excelencia, nos sitúan en el momento histórico concreto en el que enmarca Guillermo Navarro su narración, el epitome del deterioro moral e intelectual de ex-combatientes resentidos de la primera Guerra de Irak, empobrecidos, que viven de la usura, de aprovechar lo que dejan las víctimas de las tres d (decesos, divorcios y desahucios).Estos tiempos ponen a prueba el alma de los hombres; no tiene una doble moral, sino una moral única, igual de perniciosa en el consciente y el inconsciente; lo que oye en una radio racista coincide con su ideología, su falta de empatía, su crueldad...Pero al final del recorrido sinuoso de su avaricia le espera Lovecraft, que no será condescendiente, por mucho que coincida ideológicamente con el personaje. Está protagonizada por Kevin Keppi, Elpidia Carrilo et alii
En este caso el objeto que se conserva es una llave del trastero 36, siniestro, sórdido, sucio, desvencijado y repleto de objetos mohosos.
2. Ratas del cementerio. Vincenzo Natali
El segundo episodio es el más terrorífica de todos, porque la protagonista es la miseria del hombre, mientras vive y cuando fallece. Lovecraft es el vencedor absoluto de una narración en la que se impone lo escatológico, lo repugnante, lo que no queremos saber. El infeliz, el deudor, asaltador de tumbas, acude a saquearlas cuando el cadáver todavía está caliente, aún a sabiendas de que el subsuelo es el imperio de toda suerte de animales de diferentes tamaños y voracidad, (no sólo gusanos, sino ratas que engordan hasta hacerse gigantes porque se nutren de los recién enterrados y sus féretros, cucarachas, gusanos, larvas...y otros que se hacen un gran festín con los difuntos recientes). El protagonista, esclavo de la necesidad, será arrastrado a un mundo subterráneo que el común de los mortales no conoce o prefiere desconocer, resultando víctima de diferentes tipos de monstruos que viven en las tinieblas. No es necesario imaginar el infierno. Protagonizado por David Hewlett.
En este caso, el objeto que se conserva en el Gabinete de Curiosidades es un camafeo de oro.
3. La autopsia. David Prior.
Un scalpelo de forense nos revela que quizá no estemos solos en este mundo. El relato no tiene la brillantez y luminosidad de los cuentos de ciencia-ficción, sino que es tan oscuro y distópico como los demás. De este modo Guillermo del Toro logra una serie coherente y compacta, a pesar de tratar temas muy diferente. Una araña nos advierte de que descendemos al Averno, sin ser conscientes de lo que nos espera, intentando resolver una pregunta ¿Estamos solos en el Universo? Protagonizado por F.Murray Abraham.
4. La apariencia. Ana Lily Amirpour (directora de Una chica vuelve sola a casa de noche)
Un mando a distancia nos ayudará a dilucidar que hay dentro y fuera de nuestra cabeza, o más bien al contrario, nos confundirá más. Un aparato con teclas que llevan números, encajonadas en un instrumento de plástico que distorsiona la realidad. El relato está basado en una historia corta de Emily Carroll, y protagonizado por Kate Micucci y Dan Steveny, y ubicado espacialmente en un suburbio de clase media norteamericana en época de Navidad, cuando la gente se hace regalos; los vecinos de estas comunidades suelen ser rudos y violentos, sin percatarse en absoluto de ello: matan pájaros para convertirlos en objetos inánimes e inútiles (magnífica representación de la transformación de un pato vivo, un buen ejemplar, en escultura muerta); tienen armas de cualquier tipo en casa, no sólo pistolas, sino hachas, las que convierten una historia aparentemente dentro de la normalidad en un splater, que, en manos de una mujer acomplejada e insatisfecha se tornan instrumentos muy agresivos. En el subtexto la convicción de que cualquier fórmula cosmética mágica convierte a una mujer insignificante y vulgar en las vampiresas que le sirven de referente, compañeras de trabajo en un banco. Ana Lily Amirpour nos conmovió en aquel relato gótico tan particular, Una chica vuelve sola a casa de noche, que como Stacey son más peligrosas que lo que anuncia su aparente debilidad. Un relato actual, basado en la violencia implícita en la sociedad norteamericana, la única capaz de denunciar siempre que tiene ocasión, lo que la realidad de estos suburbios placenteros esconde, lugares que sirvieron de escenario a la película de Carpenter, Halloween, que inició un género. Un mando a distancia será la curiosidad que esconde la caja de la que tiene la llave Guillermo del Toro, objetos que le sirven para contar sus historias a través de diferentes cineastas y relatos variados.
5. El modelo de Pickman. Keith Thomas.
6. Sueños en la casa de la bruja. Catherine Harwicke.
7. La visita. Panos Cosmatos.
8 . El murmullo. Jennifer Kent.
* Las manifestaciones del doble en la narrativa breve contemporánea. Tesis doctoral, dirigida por Fernando Valls Guzmán
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