El quinto elemento. Luc Besson.









Ficha técnica: 


Título original: The Fifth Element (Le cinquième élément) 
País: Francia
Año: 1997 
Duración: 127 min.  

Director: Luc Besson 
Guión: Luc Besson & Robert Mark Kamen .
Casting: Lucinda Syson.
Fotografía: Thierry Arbogast 
Música: Eric Serra.
Edición: Silvye Landra.
Dirección artística: Ira Gilford.
Decoración del set: Maggie Gray y Anna Pinnock.

Diseño de producción: Jean-Paul Gaultier.
Jefe de Departamento de maquillaje: Lois Burwell.
Peluquería: Sarah Love.

Productor: Patrice Ledoux.
Productor asociado: John A.Amicarella.
Diseño de producción: Dan Weil.
Compañías Procutoras: Gaumont;  Colombia y Sony Pictures. 

Intérpretes: 


Bruce Willis: Korben Dallas,
Gary Oldman: Jean-Baptiste Emanuel Zorg, 
Milla Jovovich: Leeloo,
Luke Perry: Billy, 
Ian Holm: Padre Vito Cornelius,
Chris Tucker: Ruby Rhod, 
Brion James; General Munro,
...

Premios: 


1997: Nominada al Oscar: Mejores efectos de sonido 
1997: BAFTA: Mejores efectos visuales 
1997: 3 premios César: Fotografía, diseño de producción, director. 8 nominaciones .

Sinopsis: 


En el siglo XXIII la amenaza del mal es de tal calibre que tan solo el quinto elemento puede alimentar la esperanza de sortear el riesgo y caminar hacia una sociedad mejor; este elemento, apoyado en las piedras del horno de los cuatro elementos básicos de los primeros filósofos, -fuego, agua, tierra y aire.; la nave en que se traslada es destruida por los Mangalores malignos, por lo que un equipo de científicos usan el ADN de sus restos para construir un ser blanco perfecto llamado Leelo, una mujer que se escapa del laboratorio y se encuentra con un taxista, el Mayor Korben Dallas, que la ayuda a escapar de la policía. Leeloo les informa de que debe cumplir su misión, mientras los vllanos utilizan al codicioso y cruel Juan Bautista Emanuel Zorg y su equipo de Mangalores mercenarios para recuperar las piedras y evitar la protección del quinto elemento.

Comentario:


En pleno mes de agosto se ha estrenado un film controvertido del peculiar francés, Luc Besson, que no le ha hecho nunca ascos a la aceptación en su cine de los avances de la industria norteamericana, y que ahora recibe una crítica mixta: no muy buena para la trama, en la que no parece tener demasiado interés, satisfactoria por la creación de una imagen que mezcla texturas, hipertextual, multireferencial y moderna, que atrae al espectador por ese lado del espectáculo y el juguete de que hablaba Orson Welles.  Al mismo tiempo Besson opta por desarraigar su historia, situarla en un tiempo y lugar diferente al del cómic, y actualizar lasdoctrinas que inspiran el tratamiento de la igualdad visual de hombres y mujeres y del nuevo teatro de las relaciones internacionales, en el que los salvajes de ahora ya no muestran signos de atraso, sino que han llegado a un loable estado de bienestar en un pequeño planeta que la avaricia ha destruido.

Luc Besson nos presenta un film del estilo al que nos tiene acostumbrados, en el que los roles masculino y femenino están perfectamente diseñados, con un espectacular envoltorio mainstream. No hay que restar importancia a este planteamiento puesto que es una película que llenó las salas y se convirtió en una obra de culto para ciertos sectores a causa de las plasticidad de algunas imágenes, como la de Leelo (Milla Jorovich), el quinto elemento, con su cuerpo escasamente oculto tras las famosas vendas térmicas, que se ha convertido en un icono erótico, y el desplazamiento de los vehículos volantes en una ciudad futurista inspirada en la Metrópolis de Fritz Lang. Estas imágenes se han incorporado en el imaginario colectivo, por la la fuerza constativa de las imágenes (Roland Barthes).

El hombre, Korben Dallas (Bruce Willys), un antiguo militar es el hacedor, el homo faber, el sujeto de la acción llamado a superar obstáculos y pruebas; Leelo, a pesar de su inteligencia superior, por sus circunstancias excepcionales, debilitada por la ambición de todos los grupos que combaten, está condenada a la inmovilidad, la impotencia y la espera, sin poder hacer otra cosa que desear el deseo, y es parte de la recompensa que espera el héroe al final de sus tribulaciones. Es la mujer perfecta, con un cuerpo y una cara deseable tanto en la diégesis como en la extradiégesis. En el trasfondo de esta historia de atracción sexual y amor está la eterna lucha entre el bien y el mal, planteado de forma maniquea.

Unos científico del principios del siglo XX están a punto de descubrir un arma que salvará al mundo del mal, basada en la teoría de los cuatro elementos de Empédocles. Cuando el hombre ha avanzado demasiado en sus descubrimientos, los mondoshawa, un pueblo galáctico, guardián de los secretos del arma , confiscan los fundamentos y promete volver cuando se reproduzca la ambición, hecho que ocurre cada trescientos años. Pasado este tiempo envían a Leelo, ser supremo cuya misión es salvar la tierra, organizada bajo un gobierno mundial a cuyo frente hay un Presidente de la Confederación.

En el ambiente hay una preocupación por el calentamiento económico de la tierra, que aconseja despidos masivos de trabajadores, a ser posible de empresas pequeñas para evitar la alarma social. En esta distopía futurista lo único que no ha cambiado es la mentalidad de los militares que preconizan disparar primero y reflexionar después. Curiosamente el enfrentamiento vital se producirá ante las cámaras de televisión, en el seno de un espectáculo basura llevado por un negro travestido. Todos se preguntan cuál es el quinto elemento, que no es otra cosa que el amor. Para doblegar a un macho duro, el quinto elemento adopta la forma de mujer 10, aunque, eso sí inteligente. La vida, una vez constituida, se debe basar en el amor, palabra que se resiste a pronunciar el imbatible Korben, interpretado por un icono del hombre de acción, Bruce Willis , a pesar de que con esta actitud malogre aquello por lo que ha luchado arriesgando su vida y la de otros.

El dinero, unido a fuerzas extraterrestres cuya finalidad es acabar con toda forma de vida en la tierra, será derrotado; la salvación vendrá de la mano de la espiritualidad, representada por un 'religioso', Vito Cornelius, que recoge la tradición heredada, generación tras generación, de sus antepasados. Penosa la imagen de una madre controladora, que tiene muy poca ascendencia sobre un hijo independiente, que vive con su gato, y que viola constantemente todo tipo de normas, incluidas las del complejo tráfico de 1214, por lo que pierde los consabidos puntos de su licencia. La influencia de George Lucas se materializa en todo tipo de seres extraños y monstruos horribles en ambos bandos. El amor vence a Tanatos y el mundo puede respirar tranquilo gracias al hombre y a la mujer perfectos. Unión convencional de la acción del hombre y la belleza de la mujer, la tobelookedatnees en el modo de representación convencional femenino.



 

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