Héroes imaginarios

:::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::

Ficha técnica:

Título original: Imaginary Heroes.
País: Estados Unidos.
Año: 2004.
Duración: 111 minutos.

Dirección y Guión: Dan Harris. (Guionista de X-Men 2, 2003, Superman Returns, 2006,  Desafío a la muerte, 2007...)
Casting: Ellen Lewis y Jennifer Euston.
Dirección de Fotografía: Tim Orr
Música: Deborah Lurie, John Ottman; temas: John Ottman; Supervisor: Richard Rudoph
Editor: James Lyons.
Coordinador Departamento Artístico: Alanna Levy.
Decorador del set: Mila Khalevich.

Diseño de Vestuario: Michael Wilkinson.
Responsable de maquillaje: Marjorie Durand.
Jefe de Departamentode Peluquería:Karen Asand-Myers.

Productores: Gina Resnick y Denise Shaw, Illana Diamant.
Productores ejecutivos: Rudy Cohen y Jan Fantl, Moshe Diamant.
Co-productor: Deborah Lee.
Diseño de producción: Rick Butler.
Compañías. Productoras: Sony Pictures Classics, Signature Pictures International, ApolloProMedia, Qi Quality International Co-Production, asociada con Signature Pictures; Distribución: Tripictures

::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::

Intérpretes:

Sigourney Weaver: Sandy, la madre,
Emile Hirsch: Tim,
Jeff Daniels: Ben, el padre,
Michelle Williams: Penny Travis,
Kip Pardue: Matt Travis,
Deirdre O'Connell: Marge Dwyer,
Ryan Donowho: Kyle Dwyer,
Suzanne Santo: Steph Connors,
Jay Paulson:Vern,
Luke Robertson: Jack Johnson,
Lee Wilkof:Michell Goldstein,
Terry Beaver: Dr.Montey,
...

::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::

Premios: 

2004: National Board of Review: Mención especial
2004: Festival de Chicago: Nominada al Mejor largometraje
2005: Satellite Awards: Nominada a Mejor actriz drama (Sigourney Weaver).

::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::

Sinopsis: 

'Héroes imaginarios' examina un año largo en la vida de una familia de clase media alta. Cuenta con humor sardónico la historia de una familia contemporánea en crisis, a causa de una desgracia,ante la que sus miembros se derrumban. Tim (Emile Hirsch), la oveja negra de la casa, pasa por la vida como si fuera una pesadilla. Su padre Ben (Jeff Daniels) empieza a tratar a su mujer y a su hija como extrañas y desconecta del mundo que lo rodea, mientras que la madre, Sandy (Sigourney Weaber) se dedica a fumar porros y a utilizar todo el sarcasmo de que es capaz. Al mismo tiempo le declara la guerra a una vecina por algunos secretos muy bien guardados que amenazan con devorar la familia. La película trata con patetismo y humor mordaz lo que es formar parte de una familia, lo bueno, lo malo y todo lo que hay entre un extremo y otro.

::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::

Crítica:

A nivel individual, como persona,  cada cual se lo monta como puede y es cuando actúa como ciudadano cuando adquiere un compromiso social con los demás. Lo bueno de las manifestaciones artísticas plásticas contemporáneas es que vienen precedidas de un manifiesto, que nos ahorrarían, en el caso del cine, mucha palabrería sobre los guiones, el timing, la estructura, los personajes, etc. Del mismo modo que algunos pintores se exceden de la tela y siguen pintando en el marco o en la pared, porque nada puede constreñir su espíritu creativo, Godard quiere hacer cine sin personajes, orientando al espectador con enormes títulos con los colores de la bandera de su país, lo que ha hecho fortuna entre sus admiradores. La labor del crítico debería ceñirse a orientar a quienes le siguen, porque conectan con su ideología y su forma de ver el mundo, a manifestar qué o por qué le ha gustado o disgustado de un film, sin pontificar sobre cánones o corsés académicos que hace tiempo que han sido abandonados.

A Javier Ocaña, del diario 'El País, le parece una película estimable, aunque, de acuerdo con su criterio, "puede que por miedo a que su tragedia griega resulte demasiado sangrante, Harris añade una pizca de humor extravagante que desorienta más que perturba". En lo que se supone que son las antípodas ideológicas y del gusto cinematográfico, E. Rodríguez Marchante (diario 'ABC') el film es "un pedazo de drama  que se te cae encima como la tela de un paracaídas al tomar tierra." (extractos de crítica en Filmaffinity).

::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::

Comentario:

En cierta ocasión me dijo un amigo muy sabio, que, al ser preguntado por una persona que ambos conocíamos, respondió que él sólo la conocía como amiga, pero que como amante o como madre no era capaz de emitir ningún veredicto. Hay gente, por el contrario, muy osada, que, aun reconociendo que no es madre se permite el lujo de emitir una opinión, a su modo de ver, muy autorizada en una de las cuestiones más complejas que rigen la vida de hombres o mujeres. Incluso aquel que ha sido abandonado siendo niño por sus progenitores, los busca al llegar a la vida adulta, y eso sí lo puede comprender más de uno; al tratar, pues, el tema de la familia, un constructo además de afectivo, ideológico, es necesario que surja el conflicto entre las diferentes formas de contemplarla, de acuerdo con las ideas de cada cual. El cine americano se ha metido, sin ambages, en este terreno, desde la perspectiva del género de terror, como el film producido por Michael Bay, 'La matanza de Texas El origen', (Jonathan Liebesman, 2006), social,  American Beauty,(Sam Mendes, 1999) o religioso 'Navidad ' (Catherine Hardwicke. 2006)

Jamás supe de verdad que quería a mis padres hasta que murieron, dice Sandy; muerto el hijo mayor, el menor se convierte en el confidente y amigo de la madre, mientras que el padre, entrenador de Matt, siente la muerte del hijo como un fracaso personal. La fiesta de unos jóvenes en casa de uno de ellos, ausentes los padres y sin algún adulto presente, demuestra hasta qué punto se equivoca quien enjuicia de forma superficial,  en especial sectores de la misma clase social que los Travis, que no pueden admitir que las cosas se produzcan como ocurre en el seno de esta familia ficticia, de conducta intachable ante la sociedad hasta el suicidio del hijo mayor, que no han sabido ver, más aún ni siquiera han podido evitar las condiciones que los conducían al trágico final, algo que torturaba al padre y no lo dejaba descansar . Cada uno de ellos va a escapar de la realidad como pueda, como ha hecho hasta el momento : fumando porros, enfrentándose a los vecinos, culpando a los demás de su desgracia... ¿Qué tal un chute de adrenalina como el que experimenta la protagonista el mismo día que descubre, tras sufrir la desgracia de ver morir al mayor, que el menor no sólo conduce borracho, sino que es objeto de bullying escolar, una humillación que padece en silencio, sin denunciar jamás al agresor?

Tim Orr describe una clase social en la que el número de suicidios de adolescentes y jóvenes, en un medio en el que no  carecen de nada, es excesivamente elevado; se drogan hasta las cejas y ponen bombas en los lavabos del colegio, y, con frecuencia tienen que prestar, por estos pecados reiterados, servicios comunitarios, al ser menores de edad y no poder ingresar en un centro penitenciario. La revelación final nos mostrará a unos personajes sometidos a un destino adverso por un pecado original que llevan arrastrando dieciocho años y que es la verdadera causa de la tragedia que asola a la familia, mal que parece más extendido de lo que alguno pudiera creer, como lo prueba el alegato final de una alumna en la fiesta de graduación del Instituto.Este giro de lo acontecimientos cambia la valoración que el espectador pueda haber hecho de este núcleo familiar burgués al inicio del film, mostrándonos a sus miembros como seres cínicos e hipócritas que prefieren mirar hacia otra parte cuando el daño o perjuicio que los daña se produce dentro de las paredes del sacrosanto hogar. Como las críticas demuestran el efecto de esta representación no es la catarsis ni la purificación del que asiste al espectáculo, sino un cabreo monumental de ciertos sectores, al sentirse señalados. No somos héroes, le dice Kyle Dwyer, (Ryan Donowho), a  su amigo Tim. La realidad los ha vuelto perversos e injustos con los que son más débiles que ellos, y cuando llega su oportunidad de vengarse no la dejan pasar. Una película más dura que la sobrevalorada American Beauty de Sam Mendes (1999), porque la crítica no se circunscribe al enfrentamiento entre dos familias de ideología y sensibilidad muy opuesta, que representa a las dos Américas, sino que se extiende a toda la clase media americana que cree tenerlo controlado, y acaba comprendiendo que no están a salvo de nada y que lo único que pueden hacer es tratar de satisfacerse cada uno a sí mismo, ya que dicho control les está vedado.