Temporada alta. Clare Peploe

Clare People, esposa de Bernardo Bertolucci

Ficha técnica:

Título original: High Season,
País: Reino Unido.
Año: 1987.
Duración: 104 minutos.
Dirección: Clare Peloe .
Guión: Mark Peploe y Clare Peploe.
Director de Fotografía: Chris Menges.
Música, compuesta y dirigida por Jason Osborn.
Edición: Gabriella Cristiani.
Productor: Clare Downs.
Productor ejecutivo: Michael White.
Co-Productor: Raymond Day.
Diseño de Producción: Andrew McAlpine.
Productor asociado: Mary Clow.
Supervisor de Producción: Dimitri Dimitriadis .
Diseño de Producción: Louise Stjernsward.
British Screen y Hemdale Film Corporation; distribución: Curzon Film

Intérpretes:

Jacqueline Bisset: Katherine,
James Fox : Patrick,
Irene Papas: Penelope,
Sebastian Shaw: Sharp,
Kenneth Branagh: Rick,
Lesley Manville: Carol,
Robert Stephens: Konstantinis,
Geoffrey Rose: Thompson,
Paris Tselios: Yanny,
Ruby Baker Benny,
George Diakoyorgio: Mayor,
Father Bassili: Pappas,
Capitan Stelios: Fisherman.

Premios:

1987: Festival de San Sebastián: Concha de Plata

Sinopsis:

"Temporada alta" es una comedia romántica que transcurre en una idílica isla griega, habitualmente invadida por montones de turistas.

Katherine es una fotógrafa idealista con talento, pero arruinada. Con la ayuda de Sharp, su amigo historiador, intenta salir de sus dificultades financieras vendiendo una vasija griega, supuestamente antigua. El desastre se produce cuando los turiatas llegan a la isla, alteran la vida de Katherina y accidentalmente rompen la vasija, rompiendo de paso sus planes de recuperación de su cuenta bancaria. 

Comentario:

Clare Peploe, casada con Bernardo Bertolucci, ha dirigido cuatro películas entre 1970 y 1971, entre ellas Temporada alta. La Grecia que nos presenta no tiene que ver con  la pobre nación que hoy  sufre las consecuencias de las especulaciones financieras que no provocó, como país. La mirada que esta mujer proyecta sobre Grecia es la de una mujer culta, perteneciente a una elite social, económica y cultural, que había encontrado el paraíso en bellas islas del Egeo o el Adriático, apenas holladas por los pies de los turistas, en las que los lugareños les rendían el mismo culto que a los dioses de la antigüedad. Lo que las hacía más bellas era su soledad; la construcción sin límites ha acabado unificando las costas y extendiendo el feismo por todos los mares de la Tierra.

Estos lares estaban poblados de viejas arrugadas, desdentadas (dentro de poco medio occidente será así), vestidas de negro y cubriendo sus cabezas con un pañuelo, hombres tostándose al sol y jóvenes como Yanny que sueñan con poder emigrar un día al continente y volar hacia Inglaterra; en la plaza de una pequeña población de la isla de Rhodas abre un establecimiento de bebidas al que llama 'Lord Byron', y erige un monumento a los turistas. El papel que desempeña la madre de defensora de las esencias griegas y odio al extranjero es francamente ridículo.

Entre la atractiva fotógrafa, interpretada por Jacqueline Bisset,  y su atractivo marido, el guapo James Fox, se establece un debate 'intelectual' un tanto fofo, en el que enfrentan  el voyeurismo de la fotografía  a la capacidad de percepción de la pintura y la escultura. Ambos viven en un constante dolce far niente en casas con magníficos miradores al mar, yates, amistades con espías, tasadores y millonarios de la Quinta Avenida. Nada existe excepto ellos y la folclórica madre de Yanny, Penélope, tristemente interpretada por Irene Papas.