La jungla: Un buen día para morir. (La Jungla 5). John Moore.

Ficha técnica:

Título original: A Good Day to Die Hard.
País: Estados Unidos.
Año: 2013.
Duración: 97 minutos.
Dirección: John Moore. 
Guión:  Skip Woods.
Dirección de  Fotografía: Jonathan Sela.
Música: Marco Beltrami.
Edición: Dan Zimmerman.
Producción: Alex Young.
Diseño de producción: Daniel T.Dorrance.
Vestuario: Bojana Nikitovic.
Compañías: Twentieth Century Fox. Distribución: Hispano Foxfilms.


Intérprete:

Bruce Willis: John McClane
Jai Courtney: Jack McClane
Sebastian Koch:  Komarov
Mary Elizabeth Winstead:  Lucy
Yuliya Snigir:  Irina
Cole Hauser:  Collins
Amaury Nolasco : Murphy


 Sinopsis:

McClane llega a Moscú para averiguar el paradero de su hijo, Jack, que en su momento se alejó de él, y se queda atónito al descubrir que trabaja clandestinamente para proteger a Komarov, un delator de la corrupción imperante en el gobierno. Los McClane, que se juegan el cuello en la empresa, se ven obligados a superar sus diferencias para poner a Komarov a buen recaudo y frustrar un delito potencialmente desastroso en el lugar más desolado de la Tierra: Chernobyl.

Críticas y Comentario: 

 El anodino e impersonal John Moore no era la alternativa idónea para insuflar nuevas dosis a una tetralogía poco necesitada de este episodio con trasfondo de película para el Día del Padre y formato de concurso televisivo de parejas papá-retoño enfrentadas. Si en la cuarta entrega McClane, como sosias de Bruce Willis, se definía con aquel aforismo del ser analógico en un mundo digital, el héroe de los ochenta ha devenido ahora en obstáculo y estorbo para la intrepidez visual de un cine de acción de nuevo milenio, hueco y autosuficiente, que tendría en “Jack Reacher” (Christopher McQuarrie, 2012) a su último exponente. Jai Courtney... ("La Jungla: Un buen día para morir" y la jubilación forzosa. Almudena Muñoz.La Butaca).

Clara Rodriguez, insiste en Sensacine en  la edad del actor,  que parecen  haber pivotado unánimemente en torno a este eje : "Así es, regresa John McClane, veinticinco años después de que le viéramos (con pelo) corretear ametralladora en mano por encima de un sinfín de cristales rotos en La jungla de cristal (1988, John McTiernan). Mucho ha cambiado Hollywood desde entonces, si entonces los terroristas que atacaban el Nakatomi Plaza parecían un puñado de heavys expulsados de bandas como Def Leppard o Mötley Crüe, en la quinta entrega de la saga el rival a batir es un político ruso y su particular ejército de mercenarios..."

Filmaffinity recoge retazos de la reacción desatada en Norteamérica, que se centran más en el fracaso del director al trasladar a la pantalla un emblema del cine de acción. "Una mierda absoluta" sentencia Peter Travers de 'Rolling Stone'.

Ya escuchábamos el mismo ronroneo en la crítica del film frotagonizado por Arnold Schwarzenegger y su protagonismo en 'El último desafío'. Todo suena a final, a epílogo de unas sagas asociadas a unos monstruos de la acción insustituibles, ( Clint Eastwood, Bruce Willis, Morgan Freeman, John Malcovich...), a los que se  exprime hasta la última gota de su jugo. Pero hay algo indiscutible: se dice que Moore es un  director anodino. Aún aceptando esta realidad, lo cierto es que la máxima aportación de los norteamericanos a la cultura occidental fue la  acción, el movimiento continuo, la improvisación, que se materializó en su música sin partitura, -jazz, blues, soul...-, la action painting o el cine. Godard entendió muy bien algo que todavía cuesta de asimilar  en esta orilla del Atlántico: "decir "cine  norteamericano" es una redundancia : todo cine es de algún modo norteamericano." (Con los ojos abiertos)

Y esto es algo consustancial a filmes como 'La  Jungla de Cristal', en los que el simple trailer, que no da lugar al descanso de la retina, es el mejor reclamo para muchos espectadores; eso y  el protagonismo de Bruce Willis, independientemente de  su avejentamiento. Su público quiere disfrutar de él, mientras pueda.