Muere otro día (007). Lee Tamahori.
Ficha técnica:
Título original: Die another day.
País: Reino Unido. Coproducción con Estados Unidos.
Año: 2002.
Duración: 127 minutos.
Dirección: Lee Tamahori.
Guión: Neal Purvis & Robert Wade, basado en la obra de Ian Fleming.
Dirección de Fotografía: David Tattersall, B.S.C.
Música: David Arnold. 'Die another day', cantado por Madonna.
Casting: Debbie McWilliams.
Diseño títulos: Danny Kleinman.
Supervisor efectos especiales: Chris Corbould.
Montaje: Christian Wagner.
Canciones interpretadas por Madonna.
Directores artísticos: James Hambidge, Mark Harris, Fred Hole, Jim Morahan, Stephen Scott, Alan Tomkins.
Supervisor maquillaje: Paul Engelen.
Supervisor peluquería: Colin Jamison.
Vestuario: Lindy Hemming .
Producción: Albert R. Broccoli, Michael G. Wilson y Barbara Broccoli.
Productor ejecutivo: David Pope, Anthony Waye.
Diseño de producción: Peter Lamont.
Co-productor: Callum McDougall.
Controlador financiero: Andrew Noakes.
Metro Goldwin Mayer, Eon Productions Limited
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Intérpretes:
Pierce Brosnan. james Bond.
Halle Berry: Jinx,
Toby Stephens: Gustav Graves,
Rosamund Pike: Miranda
Rick Yune: Zao,
John Cleese: O,
Kenneth Tsang: General Moon,
Will Yun Lee: Coronel Moon,
Emilio Echevarría: Raoul,
Judi Dench: M
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Premios:
2002: 2 Nominaciones a los Premios Razzie: Peor actriz secundaria y canción original
2002: Globos de oro: Nominada Mejor canción original
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Sinopsis:
Pierce Brosnan interpreta a James Bond en su mayor aventura, llena de acción y espectaculares efectos especiales. Co-protagonizada por la oscarizada Halle Berry en el papel de la sexi superagente Jinx. Muere otro día no deja un momento de respiro: persecuciones de alto voltaje, increibles escenarios naturales y unos villanos que pondrán a prueba al más famoso agente al sevicio de Su Majestad. La nueva misión de James Bond empieza con una persecución en hidrofoil a gran velocidad a través de un campo de minas en la zona desmilitarizada del norte de Corea del Sur. Desde Hong Kong a Cuba y a Londres, el agente 007 investiga en secreto los planes de Zao, el hijo del pacifista coronel Moon del ejército de Corea del Norte. El MI6 sospecha que los proyectos de Zao puedan poner en peligro la estabilidad mundial, y esas sospechas se confirman cuando 007 descubre que Zao planea, efectivamente, unificar los ejércitos de las dos Coreas, atacar Japón y, posteriormente, enfrentarse a los Estados Unidos. Antes de que Bond pueda escapar, es apresado uy torturado por Zao. Jinx (Halle Berry) y Miranda Frost (Rosamund Pike), jugarán papeles vitales en su última aventura. Además, se encontrará con el megalomaníaco Gustav Graves (Toby Stephens). Una vez liberado, Bond regresa a Londres, donde debe volver al trabajo, cuando se descubre que Gustav Graves, un misterioso millonario, parece tener “negocios” con la gente de Zao y, además, puede ser una gran amenaza para el mundo, ya que ha fabricado un satélite capaz de dirigir la luz solar a lugares específicos de la Tierra.(Filmaffinity)
La llegada de Pierce Brosman supone una intensa remodelación del personaje, que se convierte en un auténtico metrosexual, concepto inventado en Gran Bretaña por Mark Simpson en 1994 para definir al nuevo hombre del siglo XXI, un macho urbanita al que le gusta vestirse con ropa a la moda, se arregla las uñas, cuida su piel, usa cremas, se tiñe el pelo, etc. Se "gusta" a sí mismo y no tiene miedo de hacerlo saber o de manifestarlo de forma evidente. (Sex Bond. 007 y la liberación sexual masculina.Antonio José Navarro. Dirigido por...Octubre 2012).
Críticas y comentario.
El film sigue el esquema tradicional de todas las paleículas de la franquicia, empezando por esa secuencia que a modo de prólogo introduce en situación a los espectadores, un preámbulo de gran violencia y exhibición de medios, especialmente los famosos gadgets del agente. La aparición del señuelo sexual, Halle Berry, emulando a Ursula Andress cuando sale del agua en Agente 007 contra el Dr.No, pierde todo su encanto por un balanceo exagerado de sus caderas, pretencioso y redundante, cuando se produce casi imediatamente después de la cargada imaginería constituída por figuras de hielo y de fuego en que se inscriben los títulos de crédito.
Se ha considerado por algunos críticos una de las películas más satisfactorias de Bond, a no ser por los efectos digitales, más propios del género de ciencia ficción para los fans puristas de la saga. Pero no defrauda en el uso de los elementos característicos de la franquicia: su éxito con las mujeres, los espectaculares y sorprendentes gadgets, la acción trepidante que le salva en situaciones imposibles, y ahora un Aston Martin que se esfuma y desaparece lo que lo convierte en invulnerable para los creadores de Icarus, Zao o el millonario Gustav Graves. Espectacular combate entre ingleses y coreanos, en un palacio de hielo, que indefectiblemente ganará el Agente 007, en el que participa el fabuloso automovil, y final propio de quienes teniendo agentes como Bond no necesitan dioses; dos batallas alternas, una femenina y otra masculina, se reparten el interés del público sobre quién ganará cada una de ellas.
Los detalles escenográficos y los elementos de una tipología diferencial, como el villano norcoreano con diamantes incrustados en el rostro como consecuencia de una explosión y el citado palacio de hielo, convertido en un escenario majestuoso y a la vez frágil, se convierten en elementos sobresalientes para Quim Casas (Dirigido por...Noviembre 2012), junto con el tratamiento de la violencia, más extrema que en las entregas anteriores, que actúan como preludio de la etapa que protagonizará Craig, pero aún sin la contundente influencia de los filmes sobre Jason Bourne.
La llegada de Pierce Brosman supone una intensa remodelación del personaje, que se convierte en un auténtico metrosexual, concepto inventado en Gran Bretaña por Mark Simpson en 1994 para definir al nuevo hombre del siglo XXI, un macho urbanita al que le gusta vestirse con ropa a la moda, se arregla las uñas, cuida su piel, usa cremas, se tiñe el pelo, etc. Se "gusta" a sí mismo y no tiene miedo de hacerlo saber o de manifestarlo de forma evidente. (Sex Bond. 007 y la liberación sexual masculina.Antonio José Navarro. Dirigido por...Octubre 2012).
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Críticas y comentario.
El film sigue el esquema tradicional de todas las paleículas de la franquicia, empezando por esa secuencia que a modo de prólogo introduce en situación a los espectadores, un preámbulo de gran violencia y exhibición de medios, especialmente los famosos gadgets del agente. La aparición del señuelo sexual, Halle Berry, emulando a Ursula Andress cuando sale del agua en Agente 007 contra el Dr.No, pierde todo su encanto por un balanceo exagerado de sus caderas, pretencioso y redundante, cuando se produce casi imediatamente después de la cargada imaginería constituída por figuras de hielo y de fuego en que se inscriben los títulos de crédito.
Se ha considerado por algunos críticos una de las películas más satisfactorias de Bond, a no ser por los efectos digitales, más propios del género de ciencia ficción para los fans puristas de la saga. Pero no defrauda en el uso de los elementos característicos de la franquicia: su éxito con las mujeres, los espectaculares y sorprendentes gadgets, la acción trepidante que le salva en situaciones imposibles, y ahora un Aston Martin que se esfuma y desaparece lo que lo convierte en invulnerable para los creadores de Icarus, Zao o el millonario Gustav Graves. Espectacular combate entre ingleses y coreanos, en un palacio de hielo, que indefectiblemente ganará el Agente 007, en el que participa el fabuloso automovil, y final propio de quienes teniendo agentes como Bond no necesitan dioses; dos batallas alternas, una femenina y otra masculina, se reparten el interés del público sobre quién ganará cada una de ellas.
Los detalles escenográficos y los elementos de una tipología diferencial, como el villano norcoreano con diamantes incrustados en el rostro como consecuencia de una explosión y el citado palacio de hielo, convertido en un escenario majestuoso y a la vez frágil, se convierten en elementos sobresalientes para Quim Casas (Dirigido por...Noviembre 2012), junto con el tratamiento de la violencia, más extrema que en las entregas anteriores, que actúan como preludio de la etapa que protagonizará Craig, pero aún sin la contundente influencia de los filmes sobre Jason Bourne.
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