¡El soplon! Steven Soderbergh
Ficha técnica:
Título original The informant
País: Estados Unidos.
Año: 2009.
Duración: 108 minutos.
Dirección: Steven Shoderberg.
Guión: Scott Z. Burns, basado en 'The informant' de Kurt Eichenwald.
Casting: Carmen Cuba,
Dirección de Fotografía: Peter Andrewus.
Música: Marvin Hamlisch,
Edición: Stephen Mirrione, A.C.E.
Productores: Gregory Jacobs y Jennifer Fox. Michael Jaffe, Howard Braunstein y Kurt Eichenwald.
Productores ejecutivos: George Clooney, Jeff Skoll y Michael London.
Co-productor: Michael Polaire,
Diseño de producción: Doug MMeerdink.
Vestuario: Shoshana Rubin. con un monólogo interno
Warner HomePictures, Groundswell Productions, Participant Media .
Intérpretes:
Matt Damon: Mark Whitacre,
Scott Bakula: Brian Shepard, agente del FBI,
Joel McHale: Bob Herndon: agente FBI.
Melanie Linskey: Ginger Whitacre,
Rick Overton: Terry Wilson,
Tom Papa: Mick Andreas,,
Tom Wilson: Mark Cheviron..
Sinopsis:
Mark Whitacre, un ejecutivo con un porvenir brillante, se
convierte de pronto en un espía, que, en connivencia con el FBI, graba
las conversaciones con los altos jefes de su empresa con ejecutivos de
otros países, para fijar de manera ilegal, violando la libre
competencia, los precios de los aditivos de la comida. Mark está
convencido de que esta acción le convertirá en un héroe, pero acaba con
sus huesos en la cárcel. Thriller basado en la historia real del confidente de más alto rango dentro de una corpòración de la historia de Estados Unidos.
Comentario:
Iniciada la primera crisis global, de cuyo alcance no se tiene todavía
un conocimiento exhaustivo, la máquinaria de hacer cine norteamericana
se puso en marcha, y con los datos que se iban acumulando cuando se
comenzaron a formar los primeros nubarrones negros, emprendieron la
ardua tarea de llenar las pantallas de historias de la avaricia. Mark Whithacre era el ciudadano medio, el padre de familia regordete y de apariencia simplona, papel que representa como nadie Matt Damon,
ese hombre 'de verdad', como lo define uno de los agentes del FBI, por
el que todo el mundo siente simpatía y al que la sociedad se siente
obligada a proteger y a perdonar sus errores.
Durante casi una hora el personaje comparte sus confidencias con la
Agencia de Investigación con un monólogo interno, saltando de un
pensamiento a otro de escasa profundidad: posibiliidad de ganar dinero
montando oulets, dietas, cepillado de dientes..., que ralentizan
el avance de la historia y se exceden en la descripción psicológica del
perfil del hombre que puede engañar a toda la humanidad. El buen hombre,
que 'sufre' un trastorno bipolar maniaco depresivo, ha cometido hasta
45 delitos contra el estado, en forma de sobornos, evasión de capitales y
todo tipo de fraudes dentro del mundo empresarial, movido por la
'virtud' dominante en estos tiempos posmodernos: la avaricia. Su
pretendida heroicidad permite al estado destapar a otros delincuentes
de alto standing, tan culpables como él, pero muy inferiores en su
capacidad de manipular, mentir y montar los mayores tinglados
empresariales.
La obnubilación que le produce la avaricia le lleva a acusar a todos los
que han intervenido en la operación, como perseguidores o perseguidos, a
autolesionarse para atribuir agresiones a los demás, salvar su
patrimonio en paraísos fiscales y seguir viviendo como un potentado con
cara de ciudadano medio. A pesar de la condena que debe cumplir, cuando
ya no puede engañar a nadie,consigue ocultar una buena parte de su
botín y burlar a jueces y policías. Es el típico hombre que, al ser
descubierto, sorprende a los allegados, que lo ven como ese ciudadano
medio incapaz de hacer daño a nadie, y que cubre su cuota de bondad
mercantilizada adoptando a dos niños, que comparten su vida junto con el
hijo legítimo,pero que, con un evidente desprecio a sus progenitores,
se hace pasar por huérfano para atraerse la simpatía y condescendencia
de los demás.
Tras su salida de la prisión lo único que no tendrá es dificultades económicas para rehacer su futuro.Una puesta en escena brillante, narrada eficazmente mediante una edición dinamica, eficaz y con buen timing, muy eficaz, como corresponde a una realizador de la experiencia de Steven Shoderberg, que tiene acostumbrado a su público a la idea de que pronto va abandonar el cine para dedicarse a la pintura, al tiempo que realiza una actividad cinematográfica desenfrenada. Durante este mismo año estrena Magic Mike o Haywire.
Tras su salida de la prisión lo único que no tendrá es dificultades económicas para rehacer su futuro.Una puesta en escena brillante, narrada eficazmente mediante una edición dinamica, eficaz y con buen timing, muy eficaz, como corresponde a una realizador de la experiencia de Steven Shoderberg, que tiene acostumbrado a su público a la idea de que pronto va abandonar el cine para dedicarse a la pintura, al tiempo que realiza una actividad cinematográfica desenfrenada. Durante este mismo año estrena Magic Mike o Haywire.
Cmrl.
Comentarios
Publicar un comentario
¡Deja tu comentario aquí!