Ned Kelly ( Comienza la leyenda )




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Ficha técnica:

Título original:
País: Australia.
Año: 2003.
Duración: 107 minutos.

Director: Gregor Jordan.
Guión: John Michael McDonagh,  basado  en la novela "Our Shunsine" de Robert Drewe.
Director de Fotografía: Oliver Stapleton, b.s.c.
Música.Score original: Klaus Badelt; supervisor: Nick Angel.
Editor: Jon Gregory, a.c.e.
Director artístico: Ian Gracie,
Diseñadores del set: Michael Bell, Paula Whiteway,
Decorador del set: Jill Eden,
Atrezzistas:JaneMurphy, BarryKennedy

Diseño de Vestuario: Anna Borghesi,
Diseño de maquillaje y peluquería: Jenny Shircore.
Responsable de maquillaje: Margaret Stevenson,
Responsable de peluqueria: Deb Watson,

Productores ejecutivos: Tim Bevan, Eric Fellner, Tim White.
Productor asociado: Robert Drewe.
Co-productores: Debra Hayward, Liza Chasin.
Productor en línea: Catherine Bishop.
Diseño de producción: Steven Jones-Evans.
Universal Pictures, Working Tittle yStudiCanal presentan a Endymion FilmsProduction, asociadoconWTA; distribución: StudioCanal.

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Intérpretes:

Heath Ledger:Ned Kelly,
Orlando Bloom: Joe Byrne,
Geoffrey Rush:Francis Hare,
Naomi Watts:Julia Cook,
Joel Edgerton: Aaron Sherritt,
Laurence Kinlan: Dan Kelly,
Philip Barantini: Steve Hart,
Herry Condon:Kate Kelly,
Kris McQuade: Ellen Kelly,
Emily Browning: Grace Kelly,
Kiri Paramore:Fitzpatrick,
Rachel Griffiths:Mrs.Scott,
Geoff Morrell: Mr.Scott,
Charles 'Bud' Tingwell: Premier Berry,
Saskia Burmeister: Jane Jones,
Peter Phelps: Lonigan,
Peter Youg: RedKelly,
...

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Sinopsis:

Los productores de "Elizabeth" y "Un niño grande" nos traen la verdadera historia de uno de los forajidos más 'infames' de todos los tiempos: Ned Kelly, perseguido por la policía y acosado por todo un imperio, por cuya cabeza se ofrece la recompensa más elevada del mundo. Obligados a esconderse mientras sus amigos y su familia son ilegalmente encarcelados, Neil y su banda no tardarán en convertirse en una leyenda popular.

Género: épico, histórico.

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Crítica:

En los inicios del siglo XXI resulta incomprensible la animadverssión que siguen mostrando los críticos del mundo anglosajón por este héroe popular que forma parte de la cultura de un pueblo y que ha inspirado tanto la literatura, en todas sus formas (novela, poesía, teatro), como la pintura, el cine e incluso el merchandising,  una publicidad basada en la asociación que realiza el consumidor entre una imagen mil veces repetida, que se incrusta en su subconsciente y una determinada forma que se convierte en icono de una cultura o un país, función que han desempeñado la gorra, la barba y el cabello de  El Che Guevara, los labios de Marylyn  o la armadura de Ned Kelly,  que provocan una reacción psicológica que permite a la población descodificar su significado con unos pos rasgos, hecho que llevó Andy Warhol a realizar sus  célebres pinturas pop que toda la población reconoce, que incluso adorna sus casas con carteles que funcionan como  auténticos fetiches de sus cuadros.

Armadura de Ned Kelly


Una evidencia de los que decimos se encuentra en los fragmentos de alguna crítica que incluye Filmaffinity en su sitio web: 

"La propia página califica el film de "Western australiano" (¿?) con un conocido reparto. En Estados Unidos la crítica la calificó como un film correcto, de acertada estética oscura, bastante monótono y poco apasionado." En primer lugar es duro calificar como western esta película épica que narra la historia de uno de los personajes históricos que han contribuido a forjar la identidad del pueblo australiano, según su propia sensibilidad, y que sintieron un gran placer al oir hablar a Mick Jagger con acento irlandés, el de la mayor parte de los campesinos y no inglés, la lengua de la policía, los jueces y la Reina, a la que ven como su enemiga.  Aun reconociendo que conocemos muy poco de este país que se encuentra en nuestras antípodas, empiezan a alumbrarnos cuando nos empezamos a fijar en que entre  los actores, que hoy comparten el Olimpo con las estrellas norteamericanas más cotizadas, cuatro trabajan en esta película, y todos ellos son australianos: Heath Ledger (ya fallecido), Orlando Bloom, Naomi Watts y Geoffrey Rush, ninguno de los cuales precisa ser presentado a nuestros lectores.

A. O. Scott (The New York Times) afirma que   "La historia está contada a trompicones y de forma abrupta, y la realización confía en la narración a través de una voz en off que narra unos temas cuya vida dramática nunca es mostrada en la pantalla." Cualquiera que vea el film, sin prejuicios, observará que la voz en off es la de Ned Kelly, desde cuyo punto de vista se narra la historia, descendiendo a los más pequeños detalles, en un intento de se exhaustivo incluso cuando nos cuenta por qué razón pega fuerte a su  contrincante en una pelea de boxeo, una acción muy secundaria, mientras se está produciendo el combate.

Pero lo que se comprende peor es por qué dice Antonio Weinrichter (diario ABC) que  "Esta historia nos la han contado innumerables westerns de forma más inspirada. Jordan despilfarra el marco incomparable del 'outback' austral, y el conflicto esencial de la historia, entre los inmigrantes irlandeses pobres y la represion británica es repetido como un mantra por los bandidos pero jamás visualizado." Definitivamente hemos asistido a proyecciones distintas, ya que en la película que yo he visto, desde la segunda secuencia (en la primera  honran a Ned, de 10 años de edad, con una faja por salvar a un niño del lugar), la familia de Kelly recibe constantes agresiones de la policía inglesa, que los encarcela sin razón alguna, los condena a trabajos forzados y los martiriza como una gota malaya, -se entiende que por ser campesinos pobres de origen irlandés-, hasta que, agujereado, el cráneo no tienen más remedio que rebelarse. No sé si es un mantra entrar en una casa llena de niños pequeños y llevarse a la madre, con el objetivo de que entregue a su hijo mayor, que ha estado condenado a trabajos  forzados por delitos que no ha cometido, y dejar a los hijos huérfanos y sin adultos que se hagan cargo de ellos durante una larguísima temporada. Transcurridos varios años los niños habrán crecido y los adultos estarán todos muertos; el pueblo australiano lo ve de otra manera, se solidariza con los reos y no con sus verdugos y convierte a Ned Kelly en su héroe.

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Comentario:

Llegadas estas vacaciones de primavera, tranquilas, en las que muchos buscan un merecido descanso en la lectura, el cine o la playa, y en el que la calidad de los estrenos se rebaja un poco, ha llegado el momento de realizar una búsqueda fuera de los circuitos habituales (tiendas, quioscos, programas de televisión...) y comenzamos un periplo por tiendas de ocasión, donde  mucha gente, ya con el objetivo de vaciar sus estanterías, ya por necesidad  acuden a vender libros y películas  que en su día eligieron por razones que nos gusta imaginar. Rebuscando nos hemos encontrado con esta pequeña joya australiana, país por el que estamos interesándonos cada vez más, que nos puede ayudar a comprender la idiosincrasia de quien no deja de lanzar actores a la meca del cine, que rápidamente escalan la cumbre de la fama. Los más recientes Luke Bracey (La conspiración de Noviembre, 2014, o  Margot Robbie ('El lobo de Wall Street, 2013, y Focus, 2015). La película encontrada ha sido "Ned Kelly: Comienza la leyenda", que nos ilustra sobre uno de los héroes de la cultura popular australiana, un bandolero para los ingleses.

Los materiales adicionales nos ayudan a comprender la sensibilidad de directores, pintores, escritores y élites culturales de este lejano estado. La vida de Nell Kelly, nos cuentan,  acabó en la antigua prisión de Melbourne en 1880, comenzando a partir de ese momento su leyenda. Cuando se estrenó este film dirigido por Gregor Jordan,  el público rodeó a sus actores en la premier, como afectado por una kellymanía,  (también Ledgermania y Bloom-mania) , gritando al paso de Heath Ledger y sus compañeros de rodaje y protagonistas de la banda en la ficción cinematográfica; a 200  metros de donde fue ahorcado el héroe se congregan múltiples australianos para rendir un último homenaje a su líder que, de acuerdo con la teoría expuesta por Ortega y Gasset (El espectador y el lenguaje), asocian con el actor que lo interpreta. Una historia que ha ayudado a moldear la identidad de Australia, en la que Ned Kelly es una parte importante de su patrimonio cultural. Ian Jones, autor de "Ned Kelly: A Short Life", defiende que el personaje encaja en el modelo del héroe bandolero o el forajido romántico a la perfección.

El cine y la literatura ha realizado cientos de versiones sobre lo que era y lo que representaba este personaje legendario; a los 15 años ya se había convertido en una celebridad y ofrecían 8.000 libras por su cabeza y la de su banda; la propia familia representó sobre un escenario su triste y corta vida la misma noche de su ejecución, iniciativa que fue suspendida por la policía, que, sin embargo no pudo contener el nacimiento de la leyenda; en 1906, el cineasta pionero CharlesTait  realizó "The Story of The Kelly Gang', uno de los primeros largometajes de la historia, muy bien recibido por un público que aplaudía cada vez que Ned aparecía en la pantalla, celebración que empezó a preocupar al gobierno que prohibió su exhibición en 1912; Harry Southwell, escribió, dirigió y produjo tres películas sobre  Kelly en 14 años (The Kelly Gang, 1920, que burló a la censura alabando a la policía y criminalizando a Ned; 1922:"When the Kellys Were  Out"...). En 1940 Sidney Nolan, uno de los pintores más notables de Australia realizó una serie de cuadros que ilustraban la leyenda de Ned y transmitían una imagen inconfundible y muy icónica del bandolero, reducido a su casco y una armadura negra






Fotograma de la película: Ned y su banda



En 1951, "The Glenrowan affair" , protagonizadapor Bob Chitty , un jugador de fútbol australiano, siguió encumbrando al personaje y forjando su leyenda, siempre representado por hombres mayores, hasta que en 1970 saltó a la pantalla una nueva versión, "Ned Kelly", protagonizada por Mick Jagger, de la misma edad que tenía Kelly en vísperas de su muerte, 27 años. Esta película extendió la fama de Kelly por el mundo, aunque en Australia era una aportación más a montones de expresiones de todos los estilos: pintura, cómics, novelas, poemas, obras de teatro, óperas o ballets; su imagen vende desde camisetas hasta paños de cocina, y las masas acuden al museo a ver sus restos más codiciados: la armadura,  la faja que recibió por salvar a un niño, Dick Shelton,  de morir ahogado, cuando tan sólo tenía 10 años y la "Carta de Jerilderie, un documento de 56 páginas, dictado  a Joe Byrne, señalando las injusticias cometidas por la policía inglesa contra él y su familia. La importancia de Kelly en la cultura australiana es de tal envergadura que lo convirtió en protagonista  de la ceremonia inaugural  de los juegos olímpicos de Sidney del año 2000. La novela de Robert Drewe "Our Shunsine" sirvió de base para el film de Gregor Jordan.

Los cuatro personajes de la banda eran :Ned Kelly, interpretado por Heath Ledger, Dan Kelly, representado por Laurence Kinlan, Steve Hart, al que da vida Philip Barantini y Joe Byrne, encarnado por Orlando Bloom. Si en los últimos tiempos nos causaba asombro ver la forma en la que estaba creciendo la industria cinematográfica australiana, comprada masivamente por Hollywood, ahora nos ha complacido conocer una página importante de su historia; el cine americano nos ha dado a conocer sus iconos culturales, -el General Custer, Billy The Kid (Billy el Niño), Patt Garret y otros muchos; Inglaterra nos ha vendido el pirata Drake, que disfrutaba de patente de corso para violar todas las leyes de navegación, etc.; cada país europeo tiene  en su panteón de héroes,  personajes que se enfrentaron a los poderes públicos y sus representantes cuando los consideraron injustos y fueron aclamados por el pueblo como héroes. Este es el caso de Ned Kelly, que a más de un ocioso en busca de distracción le gustará conocer.

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