Kingsman: Servicio secreto. Matthew Vaughn
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Ficha técnica:
Título original: Kingsman: The Secret Service.
País: Reino Unido.
Año: 2015.
Duración: 129 minutos.
Dirección: Matthew Vaughn.
Guión: Mathew Vaughn, Jane Goldman, basado en el cómic de Mark Millar y Dave Gibbons.
Casting: Reginald Poerscout-Edgerton, CSA.
Dirección de Fotografía: Georg Richmond.
Música: Henry Jackman, Matthew Margeson.
Montaje: Conrad Buff IV, Eddie Hamilton,a.c.e. y Jon Harris.
Coordinador especialistas: Adam Kirley.
Decoradores del set: Jennifer Williams, David Morison.
Diseñadora de Vestuario: Arianne Phillips, en colaboación con la tienda Mr. Porter.
Responsable de peluquería y maquillaje: Lesa Warrener.
Productores: Adam Bohling, David Reid y Matthew Vaughn.
Productores ejecutivos:Mark Millar, Dave Gibbons, Stephen Marks, Claudia Vaughn y Pierre Lagrange.
Co-productor: Jane Goldman
Diseño de producción: Paul Kirby,
Compañías. Productoras: Marv Films, Cloudy Production, TSG Entertainment para 20 th Century Fox.
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Intérpretes:
Colin Firth: Harry Hart/Galahad,
Samuel L.Jackson: Valentine,
Taron Egerton: Gary Unwin,
Michael Caine: Arthur,
Sofia Boutella: Gazelle,
Mark Strong: Merlin,
Mark Hamill: Profesor James Arnold,
Jack Davenport: Lancelot,
Sophie Cookson: Roxy,
Tom Prior: Hugo,
Jack Davenport: Lancelot.
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Sinopsis:
Definida como un cruce entre 'James Bond' y 'My Fair Lady', cuenta la historia de Jack (Colin Firth), un espía retirado del MI6 que decide entrenar a su sobrino Gary (Taron Egerton), un joven delincuente que opera en las calles de Londres, para convertirlo en un agente del Servicio Secreto Británico, 'Kingsman: Servicio Secreto', es la adaptación de la novela gráfica homónima del aclamado guionista de cómics Mark Millar, artífice de grandes éxitos cinematográficos como 'Kick-Ass' o 'Wanted (Se busca)'.
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La idea de este film es trasladar al espectador cómo se forma un agente secreto de una agencia, ficticia, Kingsman:Servicio Secreto, que reúna las características del celebérrimo James Bond, agente 007 al servicio de Du Majestad . De las experiencias de Matthew Vaughn y Mark Millar en Kick Ass: Listo para machacar, y X-Men: Primera generación, surgió un libro, un comic book, "The Secret Service", publicado por la Editorial Icon entre junio de 2012 y junio de 2013, del que fue coautor Dave Gibbons (dibujante de "Watchmen", "Batman","La broma asesina" y "Marta Washington"...).El libro cuenta la historia de Eggsy (Taron Egerton), un chico callejero, sin estudios, reclutado por Harry Hart, el espía británico, el hombre flemático que viste traje de rayas y porta paraguas, que adopta el alias de Galahad y atribuye a su apadrinado el de Lancelot, hundiendo las raíces en lo más profundo de la tradición literaria anglosajona.
Gary "Eggsy"Price, a pesar de su escasez de recursos, goza de unos antecedentes en el sector, ya que su padre fue condecorado por perder la vida en el cumplimiento de una misión clasificada. El hijo, que a la sazón tenía cinco años, recibió un teléfono que sólo podía usar una vez en caso de necesitar ayuda especial, ayuda que utilizará el joven 17 años después para salir de la cárcel. Acude a su llamada Hart, quien le debe la vida a su padre, por lo que se hará cargo del chio y lo introducirá en la agencia, tras superar una serie de pruebas pelígrosas y de difícil superación, especialmente penosas para quien parte de un estatus cultural, económico y social muy inferior al de sus competidores.
Harry pisa los talones de un hombre sospechoso de la desaparición de eminentes académicos, científicos y artisas: Richmond Valentine (Samuel L.Jackson), un empresario tecnológico, un activista desilusionado y resentido, que planea salvar la Tierra de consecuencias devastadoras. Samuel L.Jackson representa bien el prototipo de villano que se opone a un espía británico y de las superpotencias emergentes, que se materializa en un plan malthusiano maquiavélico consistente en la distribución gratuita entre la población de tarjetas SIMS que estimulan la agresión física entre los seres humanos y reducen las inhibiciones. Sólo se salvarán unos pocos elegidos en función de su inteligencia, su poder y su belleza, trasportados con la ayuda de unos chips de protección a una base secreta.Valentine, como todos los villanos del cine de espías y héroes, necesita una secuaz, Gazelle (Sofia Boutella), que en lugar de piernas tiene unas prótesis que, cuando luchan, sacan unas afiladas cuchillas mortales.
La idea de este film es trasladar al espectador cómo se forma un agente secreto de una agencia, ficticia, Kingsman:Servicio Secreto, que reúna las características del celebérrimo James Bond, agente 007 al servicio de Du Majestad . De las experiencias de Matthew Vaughn y Mark Millar en Kick Ass: Listo para machacar, y X-Men: Primera generación, surgió un libro, un comic book, "The Secret Service", publicado por la Editorial Icon entre junio de 2012 y junio de 2013, del que fue coautor Dave Gibbons (dibujante de "Watchmen", "Batman","La broma asesina" y "Marta Washington"...).El libro cuenta la historia de Eggsy (Taron Egerton), un chico callejero, sin estudios, reclutado por Harry Hart, el espía británico, el hombre flemático que viste traje de rayas y porta paraguas, que adopta el alias de Galahad y atribuye a su apadrinado el de Lancelot, hundiendo las raíces en lo más profundo de la tradición literaria anglosajona.
Gary "Eggsy"Price, a pesar de su escasez de recursos, goza de unos antecedentes en el sector, ya que su padre fue condecorado por perder la vida en el cumplimiento de una misión clasificada. El hijo, que a la sazón tenía cinco años, recibió un teléfono que sólo podía usar una vez en caso de necesitar ayuda especial, ayuda que utilizará el joven 17 años después para salir de la cárcel. Acude a su llamada Hart, quien le debe la vida a su padre, por lo que se hará cargo del chio y lo introducirá en la agencia, tras superar una serie de pruebas pelígrosas y de difícil superación, especialmente penosas para quien parte de un estatus cultural, económico y social muy inferior al de sus competidores.
Harry pisa los talones de un hombre sospechoso de la desaparición de eminentes académicos, científicos y artisas: Richmond Valentine (Samuel L.Jackson), un empresario tecnológico, un activista desilusionado y resentido, que planea salvar la Tierra de consecuencias devastadoras. Samuel L.Jackson representa bien el prototipo de villano que se opone a un espía británico y de las superpotencias emergentes, que se materializa en un plan malthusiano maquiavélico consistente en la distribución gratuita entre la población de tarjetas SIMS que estimulan la agresión física entre los seres humanos y reducen las inhibiciones. Sólo se salvarán unos pocos elegidos en función de su inteligencia, su poder y su belleza, trasportados con la ayuda de unos chips de protección a una base secreta.Valentine, como todos los villanos del cine de espías y héroes, necesita una secuaz, Gazelle (Sofia Boutella), que en lugar de piernas tiene unas prótesis que, cuando luchan, sacan unas afiladas cuchillas mortales.
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Críticas:
Kingman: Servicio secreto no deja de ser una historia sobre la transmisión de valores, el recambio generacional y la relación entre maestro y discípulo, todo ello en clave de evanescente relato de aventuras tecnológicas y espionaje tradicional. Pese a l patina conservadora de los personajes -Hart es, en cierto modo, un heredero algo anacrónico de los valores del viejo imperio británico pasadopor la flema inglesa y los residuos de los movimientos pop de los sesenta-, el relato no se excede en los elementos más tópicos." (Landelot y Pigmalion.Quim Casas.Dirigido por..., febrero, 2015).
"Kingsman es, básicamente, un ejercicio de pirotecnia cínica, sin un verdadero compromiso con sus supuestas fuentes: un juguete de transgresión inocua, una lección práctica de subtarantinismo mal asimilado… una película, en suma, que ni siquiera cree en sí misma (al servicio secreto de su obviedad." (Jordi Costa, 25 de febrero de 2015).
"El filme está repleto de acción, humor (los whiskies de buena marca propician algunos gags divertidos) y referencias al cine y a la cultura popular. Los agentes forman parte de una secta señorial y están bautizados con nombres del ciclo artúrico. Al joven protagonista no le suenan los títulos de Nikita o Pretty woman, pero es un fan de My fair lady, muy acorde con la pigmaloniana peripecia que vive. Hay un ingenioso comentario a las siglas J. B., aplicables a James Bond, Jason Bourne y Jack Bauer. Y los conocedores del cómic original agradecerán la presencia de Mark Hamill, que este año volverá a ser Luke Skywalker, pues el propio actor aparecía en las viñetas creadas por Millar y Gibbons. También está Michael Caine, el jefe de la organización, recordándonos que un día ya lejano fue Harry Palmer, el espía con gafas. Kingsman es un entretenimiento sin duda superficial pero grato, simpático y tan fresco como una ensalada veraniega. Una ensalada de espías, claro está." ('Kingsman: Servicio secreto' : Ensalada de espías. Jordi Batlle Caminal. La Vanguardia, 27 de febrero de 2015).
"Kingsman es, básicamente, un ejercicio de pirotecnia cínica, sin un verdadero compromiso con sus supuestas fuentes: un juguete de transgresión inocua, una lección práctica de subtarantinismo mal asimilado… una película, en suma, que ni siquiera cree en sí misma (al servicio secreto de su obviedad." (Jordi Costa, 25 de febrero de 2015).
"El filme está repleto de acción, humor (los whiskies de buena marca propician algunos gags divertidos) y referencias al cine y a la cultura popular. Los agentes forman parte de una secta señorial y están bautizados con nombres del ciclo artúrico. Al joven protagonista no le suenan los títulos de Nikita o Pretty woman, pero es un fan de My fair lady, muy acorde con la pigmaloniana peripecia que vive. Hay un ingenioso comentario a las siglas J. B., aplicables a James Bond, Jason Bourne y Jack Bauer. Y los conocedores del cómic original agradecerán la presencia de Mark Hamill, que este año volverá a ser Luke Skywalker, pues el propio actor aparecía en las viñetas creadas por Millar y Gibbons. También está Michael Caine, el jefe de la organización, recordándonos que un día ya lejano fue Harry Palmer, el espía con gafas. Kingsman es un entretenimiento sin duda superficial pero grato, simpático y tan fresco como una ensalada veraniega. Una ensalada de espías, claro está." ('Kingsman: Servicio secreto' : Ensalada de espías. Jordi Batlle Caminal. La Vanguardia, 27 de febrero de 2015).
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